Proteína pre o post entrenamiento

Se ha planteado la hipótesis de que la ingesta de proteínas en el período inmediato post-ejercicio es la estrategia de cronometraje de nutrientes más importante para estimular la síntesis de proteína, optimizando las adaptaciones musculares.

Frente a esta presunción común, la comparación de proteínas programadas inmediatamente antes y después del ejercicio tiene una importancia teórica y práctica debido a variaciones individuales en la disponibilidad y / o conveniencia de la dosificación de proteínas con respecto a cada sujeto.

En el estudio, no se demostró la presencia de una estrecha «ventana anabólica» como se refleja, se comprueba el hecho de que el grupo PRE mostró beneficios similares en la composición corporal y la fuerza a aquellos que consumieron proteína inmediatamente después del estímulo.

A través de la gama de medidas, no hubo resultados significativos consistentemente atribuibles a la pre-ingestión de proteína antes de ejercicio.

Las implicaciones de estos hallazgos son que el usuario es libre de elegir, basado en factores individuales (es decir, preferencia, tolerancia, conveniencia y disponibilidad), si consumir proteínas inmediatamente antes o después del ejercicio.

La ingesta proteica antes y después del ejercicio tiene efectos similares en las adaptaciones musculares.

Además tampoco se encontró evidencia científica o anecdótica que sugiera que dicha ventana tenga una corta duración, es decir entonces, que el viejo mito de que la ventana anabólica tiene una corta duración de solo 30 minutos después del ejercicio, es falsa, se demostró que la síntesis de proteína si se ve incrementada después del estímulo muscular, pero este incremento puede ser tan amplio como 3 horas o incluso más, sin embargo, la tendencia señala que pasadas 3 horas la síntesis de proteína muscular inicia un ligero y paulatino descenso.

Otro punto interesante a resaltar es que tampoco se vio una diferencia sobre consumir un suplemento de proteína a una fuente de proteína común a largo plazo.

Este hecho deja muy claro: Puedes consumir proteína antes o después de tu sesión de entrenamiento, de fuente común o suplemento, y sin respetar un espacio de tiempo demasiado corto, pues no habrá diferencia en hacerlo a bases de los viejos mitos.